Editorial del 14 de junio de 2013

La fiscalía anticorrupción considera que hay indicios suficientes que prueban que Convergencia democrática de Cataluña se financió de forma irregular a través del Palau de la Música.

Cree la fiscalía perfectamente acreditado que la constructora Ferrovial pago comisiones millonarias a Convergencia a cambio de la adjudicación de obras de gran envergadura como la línea 9 del metro o la Ciudad de la Justicia, ambas en el último gobierno de Jordi Pujol. El fiscal cifra la comisión, solo para el partido, en casi 7 millones de euros.

Ferrovial enmascaraba esos pagos como patrocinios culturales al Palau de la Música. Los fondos no llegaban a la cultura sino a las cuentas del saqueador Félix Millet, su mano derecha, Jordi Montull y, lo más importante, a Convergencia.

Se repite pues la historia: obras públicas que nos costaron a todos mucho más dinero del que valían porque el presupuesto incluía la voracidad de muchos y muy ladrones intermediarios o cooperadores necesarios. Definitivamente nos han robado muy por encima de nuestras posibilidades.


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