Artículo publicado en La Vanguardia el 9 de septiembre de 1999
Texto: Víctor-M. Amela y María-Paz López

"Onda Cero dice que quiere renovación, pero ha intentado fichar a todos mis colaboradores... para hacer mi programa, pero sin mí"

La periodista denuncia que "Buruaga llamó a Onda Cero para que me dieran un toque"

Julia Otero comparó ayer con un "golpe de Estado" la supresión de su programa "La radio de Julia" de la programación de Onda Cero por decisión de la nueva propiedad de la cadena, Telefónica. "No oí marchas militares, pero sí unas rancheras", ironizó la periodista, que aludió así a la forma en que se le comunicó la eliminación del espacio, cuando ella estaba ya de vacaciones, el 2 de agosto.

Julia Otero compareció ayer ante la prensa en el Col·legi de Periodistes de Catalunya, donde reveló que "a las nueve y media de la mañana del día 3 de agosto, me llamó Francisco Álvarez-Cascos y me dijo que la decisión le parecía una torpeza, un error político, casi algo diseñado por el peor enemigo del PP".

¿A quién no gustaba el programa de Julia Otero? La periodista citó un nombre: "Sé que Ernesto Sáenz de Buruaga llamó un par de ocasiones a la dirección de la emisora para que ?me dieran un toque?". Buruaga es jefe de informativos de Antena 3, cadena controlada por Telefónica.

Según Otero, "seguramente ni Javier Gimeno, presidente de Onda Cero Radio, sabía que iba a despedirme al poco de irme de vacaciones". Otero evitó especular acerca de las causas de su despido, pero afirmó que "eliminar un programa rentable y líder de audiencia es una decisión que atenta contra la propia cuenta de resultados de Onda Cero, cosa que en una empresa privada no se entiende..., a menos que la compre otra empresa más poderosas para usarla como un juguete, para pagar favores, para hacer regalos espirituales..."

Para el nuevo equipo directivo de Onda Cero, que tomó posesión el pasado 28 de julio, Julia Otero "no encajaba en la nueva programación", según dijo ayer Enrique Beotas, subdirector general de comunicación de Onda Cero, "donde no caben títulos patrimonialistas". Beotas apuntó que Julia Otero no tenía el mismo seguimiento en todas las comunidades autónomas".

Para Julia Otero, Onda Cero "miente: añaden la mentira a la grosería de las formas". Desmintió que hubiese pedido más dinero ("mi contrato está cerrado desde 1997 hasta el 2001"), y denunció que los directivos de Onda Cero "han intentado fichar a todos mis colaboradores para hacer lo mismo que hacían en mi programa. O sea, mi programa pero sin mí. ¡A eso le llaman renovar!". Para Otero, Onda Cero, al eliminar su programa "beneficia a sus competidores".

Otero expresó su perplejidad: "Gimeno me dijo que eliminaban mi programa porque era intelectualmente elevado y elitista: ¿cómo es posible, si tenía la máxima audiencia? ¿No es el sueño de todo gestor poder aunar calidad y cantidad?"

A las acusaciones de la actual dirección de Onda Cero de que su implantación no era homogénea en España, la periodista replicó que "no he conseguido el milagro de que me escuchen donde no hay cobertura".

Otero reveló asimismo que Pío Cabanillas, director general de RTVE, le ofreció un espacio en RNE, oferta que declinó por sus características y la premura del tiempo. Julia Otero descarta hacer radio durante esta temporada, aunque podría impartir clases de periodismo en una universidad catalana.