Editorial del 1 de junio de 2022

Este miércoles, 1 de junio, se cumplen cuatro años de la moción de censura que llevó a Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno. Los gritos de "sí se puede" y aquel ya famoso abrazo de entre el nuevo presidente y Pablo Iglesias sellaban la primera moción de censura que prosperaba en la democracia española.

Atrás quedaban dos sesiones muy intensas en el Congreso de los Diputados y las imágenes de Mariano Rajoy atrincherado en el reservado de un restaurante cercano mientras el bolso de Soraya Saénz de Santamaría ocupaba simbólicamente su escaño. La negativa de Rajoy a dimitir provocó un cambio de gobierno y fue el inicio de un tsunami político que revolucionó el panorama.

Solo Pedro Sánchez se ha salvado de la trituradora de liderazgos de este período. Los líderes que parecían más fuertes resultaron efímeros y otros, que parecían débiles están demostrando gran resiliencia. Albert Rivera, Pablo Iglesias, Soraya Saénz de Santamaría, Pablo Casado... todos fueron estrellas fugaces de la política española.

Además, esta semana la Unión Europea ha logrado aprobar la sexta ronda de sanciones a Rusia, un acuerdo de mínimos para vetar parcialmente al petróleo ruso. De momento, para contentar a Hungría, se limitará a bloquear el crudo que llega por mar y no por oleoductos.