El Periódico, 28 de noviembre de 2002

Ferran MONEGAL

Y gritó Julia Otero de pronto: "¡Aquí está la reina de las mañanas!" Y la señora Campos entró por la puerta. ¡Ah, qué encuentro! La reina de las mañanas de Tele 5 y la reina de las tardes de TV-3 confluyeron ayer en La columna, y nos hicieron pasar un rato de toma pan y moja. Quizá no sean Thelma y Louise precisamente estas señoras, pero conforman una sensacional pareja. Les salió un concierto a dúo la mar de picante y sabroso. Comenzó Julia recalcando ese golpe tan hermoso, tan compañero, que había tenido la Campos esa misma mañana en su programa Día a día, ofreciendo un lugar, un acomodo junto a ella, a la periodista Isabel San Sebastián, la penúltima represaliada de A-3 TV. Y doña Tere respondió: "Sí, claro que sí. Y también le ofrezco un lugar a Pedro J., que ha sido represaliado igualmente.". Maravillada quedó la Otero. No obstante, tras un instante de reflexión, advirtió irónicamente: "¿Crees que es gente a la que hay que proteger, dada la escasez de medios de que disponen?" Y la señora Campos, siguiendo la senda irónica, contestó: "A veces, uno toma de su propia medicina". Retrancona observación, sí señora. Quizá críptica para la mayoría de la audiencia. Pero seguro que en los cenáculos, sindicatos y trincheras de la política y del periodismo, se habrá degustado con fruición.

Otro momento muy bueno fue cuando Julia --tras informarnos de que doña Tere ha sido muchos años seria y ortodoxa jefa de informativos de cadenas de radio, y que hasta posee la licenciatura en Filosofía y Letras-- le reprochó que practicase en la tele, todas las mañanas, el cotilla marujeo sobre tantos petimetres famosos que se prestan. Y le espetó en concreto: "¡Ay!, María Teresa, ¿por qué te pones tan petarda?, ¿eh?". Y doña Tere, que es muy suya, contestó: "Pues si tú me llamas petarda, yo te llamo pija, Julia" . Nos reímos todos, nosotros y ellas, a mandíbula batiente.