Artículo publicado en el diario El Pais el 6 de agosto de 1999
Texto: Rosario G. Gómez

Los trabajadores auguran una depuración generalizada

Los nuevos dueños de Onda Cero continúan con el goteo de despidos activado a principios de esta semana con la suspensión del programa de Julia Otero y la expulsión del responsable de informativos, Félix Madero. Ayer le tocó el turno al director de programas, Arturo San Román, y al de recursos humanos, Luis Domínguez. "Será una depuración en toda regla", auguró un directivo que aún conserva el empleo.

La fulminante expulsión de periodistas y altos cargos vinculados al equipo de la ONCE -antigua propietaria de la cadena- choca con el "código ideológico" aprobado por el Consejo de Administración de Onda Cero nombrado por Telefónica, dueña de la emisora desde hace dos semanas.

En él se aboga por la "veracidad, objetividad y pluralidad". El decálogo que recoge las líneas maestras que regirán la corporación de radio resalta en su primer punto que "en todo momento" se preservará "la independencia intelectual" de los profesionales. Onda Cero se marca como objetivo la máxima rentabilidad social y económica, así como "la reforma de las estructuras de la sociedad y la igualdad de oportunidades".

Esta declaración de principios contrasta con los hechos. Ayer mismo, San Román y Domínguez recibieron la correspondiente notificación en la que se les comunicaba la destitución en sus respectivos cargos y el posterior despido. Ambos acudirán a magistratura. En el caso de Julia Otero, la solución laboral derivada de la cancelación de su programa está en manos de los letrados. La periodista tenía un contrato en vigor para la próxima temporada que supera los 100 millones de pesetas.

San Román, vinculado a Onda Cero desde su fundación, hace una década, ha estado en los últimos seis años al frente de la dirección de programas y emisiones. Marcó la línea editorial de los informativos, inspirada en la neutralidad, y bajo su mandato la cadena de radio alcanzó su cota de audiencia más elevada. Al igual que Luis Domínguez, estaba muy cercano a la organización de ciegos.

"Están dando en la línea de flotación de la ONCE", comentó un miembro del equipo directivo heredado por Telefónica, convencido de que "la depuración no ha hecho más que empezar". Tras la cancelación unilateral, el pasado lunes, del programa La radio de Julia, líder de audiencia en la franja horaria de tarde, y el despido, el martes, del director de informativos, Félix Madero, los propietarios de Onda Cero desvelarán el lunes los planes que tienen reservados para Concha García Campoy.

Ayer se daba por seguro que su programa, La brújula, pasará a manos de Javier Algarra, designado director general adjunto de Informativos y Opinión por Telefónica. En la dirección de deportes, José Joaquín Brotons ha sido sustituido por José Antonio Luque, procedente de Tele 5 y ex redactor jefe de deportes de la emisora a la que ahora retorna.

Entretanto, el desconcierto entre los seguidores de Onda Cero va en aumento. Protagonistas, el programa de Luis del Olmo, recibe cada mañana en el turno de los oyentes airadas protestas por la supresión del programa de Otero.


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