Editorial del 19 de septiembre de 2016

Empieza la última semana de campaña electoral en Galicia y Euskadi con sondeos que demuestran que en ambos territorios históricos, el poder desgasta a los que gobiernan pero sobre todo a los que están en la oposición.

Las encuestas son testarudas al respecto: insisten todas en que Urkullu y el PNV pueden ver incluso ampliados sus escaños en el Parlamento vasco, y también en que Feijóo puede retener en Galicia su mayoría absoluta.

La entrada de Podemos en el parlamento vasco y la de las Mareas en el gallego presagia un terremoto político cuyas consecuencias son aún una incógnita para el futuro. Y no hablamos solo del futuro de las comunidades que votan este domingo sino del futuro de España.

No hay día que no pensemos en la famosa maldición china que como venganza desea al interlocutor que “viva tiempos interesantes”.

Hoy veremos cómo los vive el actual lehendakari y candidato por el PNV, Íñigo Urkullu.