Editorial del 22 de diciembre de 2015

Pues el monte ha parido un ratón. Después de muchos días de negociación, Junts pel Si, la coalición electoral de Artur Mas y Oriol Junqueras, han propuesto a la CUP un documento muy parecido al que Mas había ofrecido en el debate de investidura en el que tumbaron sus aspiraciones. Ese documento, también negociado por la cúpula de la CUP, propone a Artur Mas como presidente del govern junto a otros tres presidentes que llaman de “comisión de gobierno” que serían Romeva, Junqueras y Neus Munté. O sea, habría un premio gordo y mucha pedrea en ese ejecutivo.

Aunque se da por hecho que el acuerdo está cerrado, no es cierto del todo: los anticapitalistas tienen una organización asamblearia y será el próximo domingo, en asamblea general, cuando los militantes den el nihil obstat o el rechazo. Habrá 3 opciones para que voten las bases: la primera es Sí al acuerdo político y sí a Mas; el segundo, Sí al acuerdo pero No a Mas; el tercero, No a todo.

Hoy era el día tope para el principio de acuerdo aunque no deja de ser muy extraño que la CUP incumpla su palabra de negarse a investir a Mas justo ahora que la izquierda de Podemos y Colau ha ganado claramente las elecciones del 20D y que la lista de Mas ha quedado en cuarto lugar.

Igual estamos dando por hecho que todo está ya cerrado, y el domingo vemos que No. Para no pillarse los dedos, esperemos acontecimientos.


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