Editorial del 5 de marzo de 2014

El nuevo barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas, sin intención de voto, pero sí con intención de conocer el ánimo social y sus preocupaciones, arroja cifras poco optimistas.

El 86% de los ciudadanos ven aún poca luz en el futuro inmediato y demuestran que sus dos grandes preocupaciones son el paro y la corrupción, por este orden.

Hoy mismo la Unidad de Delincuencia económica y Fiscal de la Policía ha desvelado que Pedro García, el exdirector de Canal 9 , tenía el 20% de las acciones de Orange Market, el mismo porcentaje que Pablo Crespo y Álvaro Pérez, el bigotes. Según la UDEF su intervención fue decisiva para otorgar un contrato de más de 7 millones de euros para el montaje audiovisual que cubrió la visita del papa Ratzinger.

El coste real del montaje fue según la policía de 3 millones. Los otros 4 millones cuatrocientos mil se repartieron entre los integrantes de la trama Gürtel. Según la policía, solo García se habría embolsado medio millón por este concepto. Tres meses después del cierre de Canal 9, es evidente que en estas manos era inviable. ¿Habrá ocurrido o estará ocurriendo algo parecido en otros canales públicos?