Editorial del 28 de enero de 2011

Ayer empezamos con una buena noticia, el acuerdo para las futuras pensiones entre gobierno, sindicatos y patronal, un “notición” en palabras de Durán Lleida. Es una buena noticia para España, a la que acabará sumándose el PP, aunque le pese que el gobierno pueda anotarse un tanto. La paradoja en estos meses es que el interés electoral del PSOE coincide con el interés general, mientras que las expectivas electorales del PP aumentan a medida que se agravan las enfermedades sociales. La del paro, por ejemplo. Y hoy se ha sabido que en el último trimestre del 2010, 122 mil personas perdieron su trabajo. Es el cuarto año consecutivo en que eso ocurre. Hoy, por cierto, el gobierno ha subido a 400 euros mensuales lo que percibirán los parados de larga duración en lugar de los 350 que había propuesto. Una concesión a los sindicatos a cambio del aliento que supone el pacto de las pensiones.

De todo se hablará y mucho este fin de semana en Zaragoza: gran cónclave socialista con 2500 asistentes, entre ellos Zapatero y Rubalcaba. ¿Terapia de choque ante las próximas elecciones de Mayo? Habrá que estar atento a todos los gestos.


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