El Periódico, 25 de febrero de 2003

Ferran MONEGAL

Admirada Julia Otero ante la maravillosa transformación que el Barça está viviendo, invitó ayer por la tarde a Radomir Antic (La columna, TV-3). ¡Ah!, nos agradó mucho el talante y la disposición de este míster. Estuvo suave, comedido, prudente, y tuvo un rasgo que --aunque fue heterodoxo y pintoresco-- demuestra que sabe ser humilde cuando quiere: hablando del combate de mañana contra el Inter, en lugar de enfatizar su papel como mágico entrenador, dijo simplemente que confiaba mucho en una corbata que le va a traer de Milán su amigo Michel, dentro de unas horas. La llamó "corbata de suerte". O sea, que no alardeó de su condición de glorioso capitán general de los gladiadores blaugrana, quizá porque, dada la situación del club, su fichaje, más que de general, ha sido de sargento del parque de bomberos. Precisamente Julia, con ese aire pérfido que a veces camufla bajo el disfraz de la inocencia, le hizo exactamente esa maligna observación. Le dijo que llegar ahora al Barça, con lo mal que está, es el mejor momento para capitanear la resurrección. Es decir, que nuestra bella y admirada Otero es de la creencia de que, como la cosa ya no podía ir a peor, a partir de ahora todo van a ser éxitos. Ojo con estos razonamientos, basados en la ley del péndulo, que suelen fallar estrepitosamente. Recuerde Julia aquella sabia ley de la naturaleza, que reza: "Tras un feroz aguacero, tras una implacable tormenta, lejos de escampar, sigue lloviendo". Lo que sí parece, tras ver a Antic ayer en TV-3, es que puede ser un buen paraguas para cobijarnos temporalmente. De entrada, ha devuelto la esperanza donde sólo había llanto y crujir de dientes. No es poco.

Concluyamos con la perla que Oscar Nebreda contó poco después. Dijo: "Finalmente, los inspectores de la ONU han encontrado gas letal. Pero no en Irak, sino en el Barça. Se llama Gas-part. Eso es otro tipo de corbata. En lugar de traer suerte, ahoga.


Política de Privacidad Política de Cookies © 1998-2024 juliaotero.net