La Vanguardia, 26 de noviembre de 2002
JOSEP M. BAGET HERMS
Las telenovelas de sobremesa han aportado regularmente a TV3 unas audiencias extraordinarias desde los días ya lejanos de "Poble nou" y sus continuadoras hasta llegar a "El cor de la ciutat", que ya nació con vocación de inmortalidad. Este caudal de audiencia acumulada, sin embargo, se dispersaba una vez acabada la telenovela e iba a parar a otras cadenas como Antena 3 con su "Sabor a ti". Desde el estreno de "La columna", sin embargo, esta tendencia empezó a invertirse y a día de hoy el programa dirigido y presentado por Julia Otero se ha convertido en una contribución fundamental al liderazgo de TV3 con cuotas de pantalla que llegan alrededor del 30% en su edición de los viernes y se mantienen en unos niveles hasta ahora nunca conocidos en las tardes de la cadena autonómica.
Que este resultado se consiga con un espacio de contenidos periodísticos plurales, abiertos a todos los géneros y sin concesiones a la espectacularización gratuita es un dato estimulante en esos tiempos de impotencia creadora y de pánico a cualquier innovación. Julia, en cambio, se la juega cada día ya que la actualidad es el gran motor de su magazine, donde se combina entrevistas, tertulias y reportajes y secciones fijas. Y se pueden comentar libre e irónicamente los patinazos del Gobierno en el caso del "Prestige", hablar de libros no escritos necesariamente por autores mediáticos y debatir sobre fútbol. Ayer, por ejemplo, se habló, cómo no, del Barça-Real Madrid y Carles Canut puso a caer de un burro a Joan Gaspart, y se ganó una ovación de gala de la platea a pesar de su condición de "perico".
Julia Otero siempre ha sabido rodearse de óptimos colaboradores pero sería injusto dejar de reconocer en este caso que ella es el alma, corazón y vida de "La columna". Está en plena forma, rápida de reflejos, segura de sus recursos ante la cámara a la que sigue seduciendo, disfruta del programa y contagia de ese entusiasmo a todo su equipo y por supuesto a la audiencia, que no deja de crecer.