La Vanguardia, 4 de mayo de 2002
JOSEP M. BAGET HERMS
El estreno de "Gran Hermano" ha significado para Tele 5 un incremento de su audiencia durante el mes de abril, pero muy inferior al registrado en sus dos primeras ediciones cuando reventaba los audímetros. De momento no le ha servido siquiera para salir del farolillo rojo en España y en Cataluña y se hace difícil pensar que pueda dar un vuelco al marcador. El poco gancho mostrado por los nuevos prisioneros de la casa de Guadalix no es el único motivo de ese efecto menor de "GH".
El fútbol ha sido, más que nunca, el protagonista de abril gracias a las retransmisiones de la Liga de Campeones a cargo de TVE, que le han permitido conservar cómodamente la hegemonía a escala estatal. En Cataluña, sin embargo, el resto de su oferta, salvo contadas excepciones, tuvo muy poca aceptación y ha perdido seis décimas con respecto a marzo. También Antena 3 ha bajado en Cataluña y únicamente TV3 (junto a Tele 5) ha mejorado sus resultados hasta situarse en el 21,1% de cuota de pantalla. El millón de espectadores del estreno de "Plats bruts" fue la guinda para afianzar su supremacía aunque esa continuidad se debe sobre todo al dominio que ejercen por la tarde "El cor de la ciutat" y "La columna".
En vísperas de su aniversario, y del día de la madre, Julia Otero puede sentirse legítimamente satisfecha ya que su programa mantiene intactos además sus niveles de calidad en una franja horaria que no está por la labor y constituye un ejemplo de lo que es o debería ser una propuesta digna de una televisión de servicio público y destinada a la vez al gran público. Calidad y comercialidad es lo que quisiera siempre su jefe de programas, Paco Escribano, pero esta cuadratura del círculo no está al alcance de todos. Y si ella está ahí se debe a su inteligencia, profesionalidad y un duro trabajo cotidiano al frente de un equipo bien compenetrado. Ahora que en el Barça se busca sucesor a Rexach y sólo se nos amenaza con la restauración de Van Gaal, no estaría de más pensar en Julia, que de equipos sabe un rato.