La Vanguardia, 25 de octubre de 2000
Texto: Josep M. Baget Herms

El conformismo y la falta de imaginación, cuando no el miedo al fracaso, ha conducido fatalmente a los programadores de todas las cadenas a asumir unos determinados prejuicios a la hora de confeccionar sus parrillas de emisiones. Si todos los informativos pivotan alrededor de las tres de la tarde o las nueve de la noche, por ejemplo, también parece aceptado implícitamente que la sobremesa pertenece a las mujeres, y más en concreto a las amas de casa según el sentido más tradicional del término. Es de agradecer en ese sentido que TV3 haya confiado a Julia Otero un espacio como "La columna" donde a partir de la fórmula clásica del "talk show" se introduce una amplia gama de asuntos no específicamente femeninos. Las cifras de audiencia que van en aumento confirman que las mujeres también pueden interesarse por la política o el fútbol y más si se aborda desde un prisma irónico y sin prejuicios.

Julia Otero conduce el programa al filo de la actualidad por medio de debates, encuestas, informes o la participación del público con criterios abiertos y plurales. Julia se apoya en su fuerte personalidad, donde cohabitan el sentido del humor, un lenguaje coloquial, la rapidez de reflejos y el necesario punto de coquetería que ha sido marca de la casa desde los tiempos de "La luna".

Afortunadamente las mujeres ya se han incorporado mayoritariamente al mundo del trabajo y de ahí que un programa dirigido a ellas en especial, pueda hoy prescindir de cotilleos protagonizados por personajes infames. La visión indiscreta de nuestros políticos comentada por Pitu Abril -un excelente profesional vinculado especialmente a TVE- ilustra estos ambiciosos objetivos. Si "La radio de Julia" rompió conceptos establecidos en las sobremesas radiofónicas, "La columna" puede ejercer esa misma función inconformista en televisión. No resulta fácil sustraerse todos los días a la presión ambiental del famoseo y el suyo no será un camino de rosas pero este reto profesional honra a Julia Otero y también a TV3.


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