Editorial del 27 de abril de 2017

Esta mañana, representantes del PP, de C's y del PSOE han acusado a Podemos de hacer numeritos y de convertir el Congreso en un circo. La razón es la moción de censura que Iglesias ha anunciado que quiere presentar para desalojar del poder a Mariano Rajoy después de una semana hedionda de corrupción.

Las posibilidades de que la moción de censura tenga éxito son inexistentes, cero patatero, de modo que sí, podría decirse que hay “numerito” de Podemos para escenificar una performance de cara a la galería que nace, se desarrollará y morirá solo en eso, una performance.

Ahora bien, los que sacan la artillería contra la iniciativa, son también actores de vodevil muy dotados. Ciudadanos y el PSOE insisten en que la corrupción es ya una realidad insostenible pero al tiempo que lo dicen... la sostienen. Insisten los de Albert Rivera y los de la gestora socialista en la “irresponsabilidad” de una moción de censura, incluso en la “mala fe” que la promueve.

Tal ha sido la reacción furibunda que hasta Hernando, el Hernando del PP, ha podido permitirse un detalle de buena educación añadiendo un simple “no salen los números”. Ventajas de tener una oposición “tan responsable”.