Editorial del 1 de julio de 2015

Estrenamos el mes de Julio y con él la ley de seguridad ciudadana, aprobada por mayoría absoluta pero también en absoluta soledad por el partido del gobierno.

Nadie, ningún grupo de la oposición, estuvo de acuerdo con el texto de la polémica ley, bautizada como Ley Mordaza.

El nuevo marco legal para la seguridad ciudadana incluye casi medio centenar de conductas que van de leves a muy graves y castigadas con multas que van de los 100 euros a los 600 mil. La cifra tiene un claro componente disuasorio. Entre los puntos más conflictivos, está la interrupción en mítines o espectáculos religiosos y deportivos. Hacerlo puede suponer una horquilla que va entre los 600 euros y los 30 mil.

Movilizar a través de las redes sociales o convocar una manifestación sin permiso también será castigado, así como manifestarse cerca de instituciones como el Congreso. Perturbar el funcionamiento del mismo puede costar 600 mil euros. Una persona que acuda en ayuda de un desahuciado para impedir el desalojo también puede enfrentarse a una multa de 30 mil euros.

Albert Rivera ha definido la ley mordaza como “Una ley fruto de un calentón político”. Patxi López ha hablado del Miedo a la libertad del gobierno y de la “caza al disidente”.