Editorial del 6 de junio de 2014

El próximo día 19, los diputados españoles deberán ponerse en pie uno a uno y aceptar o no la abdicación de Juan Carlos I y la proclamación de Felipe de Borbón como nuevo rey de España. Aunque los partidos en España mantienen férreamente la disciplina de voto, de modo que en escasísimas ocasiones hay sorpresas, la Izquierda Plural y el Grupo Mixto han forzado que se use la misma fórmula que la de la investidura del presidente del gobierno. Por tanto veremos y oiremos uno a uno como "se retratan" -en palabras de la Izquierda Plural- a medida que sean llamados por su nombre por Jesús Posada.

Aunque parece estar más que clara la aritmética parlamentaria, al menos tres parlamentarios socialistas podrían escuchar su alma republicana y obviar el pacto de la transición, sellado con la Corona, por sus mayores en el partido.

La prueba de la disciplina la dará sobre todo Durán i Lleida, pese a los muchos días que lleva justificando el porqué de su abstención. Será uno de los diputados más incómodos, aunque no el único.