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dDONA, Núm. 16, otoño 2009

Julia nació en Monforte de Lemos, provincia de Lugo, en mayo de 1959. Se trasladó con su familia a Barcelona cuando tenía 3 años. Se licenció en Filología Hispánica y mientras estudiaba el primer curso de carrera un amigo le propuso que le acompañara a un programa radiofónico sobre cine, Protagonista, el cine, en Radio Sabadell. Julia, que entonces tenía 17 años, no sólo aceptó la oferta, sino que acabó convirtiéndose en la directora y presentadora del programa cuando su amigo se fue a la mili.

A partir de ahí no paró de trabajar en la radio y la televisión, hasta trabajar para TVE en el programa La Luna, donde se hizo famosa. Actualmente tiene una productora propia, y sigue trabajando en la radio y la televisión.

Hola Julia, cuando empezaste a trabajar en la radio, ¿qué es lo que te gustaba de tu trabajo?

Desde pequeña me ha gustado hablar y comunicarme. Desde muy pequeña los adultos decían de mí que parecía una vieja hablando, y más adelante recuerdo una profesora diciéndome de un examen: «el fondo no acaba de ser correcto, pero lo explicas tan bien que no tengo más remedio que aprobarte».

Me gusta contar historias y escucharlas, conversar... y la radio y la televisión es una conversación con gente a veces que no ves pero que sabes que están.

¿Todavía te gusta lo mismo?

El mundo ha cambiado mucho desde entonces, ahora los periódicos y las emisoras son de grandes empresas que tienen varios negocios y este es uno más, y sólo quieren ganar dinero, vender más, y el compromiso del periodista ha ido perdiendo peso.

¿Con la crisis no habrá un cambio?

Podría ser la parte positiva, sí, revalorizar conceptos desprestigiados como la felicidad como objetivo vital. Hasta ahora era tener dinero y estar bien colocado. Quizá a partir de ahora comenzaremos a valorar hacer un trabajo que nos guste... pero soy bastante pesimista, que no quiere decir triste. Si te fijas no se hace ningún tipo de reflexión social sobre estos temas, ni de la gente que la han provocado. Están probando de todos modos que todo vuelva a la normalidad, o sea, a la situación de antes.

¿Tú trabajas en lo que te gusta?

Hay días de todo, como en todos los trabajos, pero es un trabajo que lo he elegido yo y me da dinero para vivir muy bien. No todos pueden decir lo mismo.

¿Qué crees que te hizo triunfar y aún atrae a la gente de ti cuando trabajas en la radio o la tele?

Me he ganado la credibilidad y, además, tengo naturalidad y espontaneidad. Soy igual en la vida que ante una cámara.

¿Y la confianza contigo misma?

A veces cuando pienso en las cosas que hacía hace 20 años me asusto. Era inocente y atrevida...

Pero tu confianza contigo misma ¿de donde la sacabas?

Yo soy hija única y mis padres me dieron mucha confianza, nadie creía más en mí que ellos. Creo que es muy importante que las personas que más te quieren te transmitan la idea de que puedes hacer lo que quieras. Si ellos confían en ti, ¿por qué no debes confiar en ti mismo? Además, la vida me ha dado sustos de salud, de los 19 a los veinte y pico entré en la sala de operaciones muchas veces, y vi la muerte cerca. La vida me cambió, maduré. Después, a los 28 años pasé de ser una desconocida a ser famosa de la noche a la mañana. Y me podría haber vuelto loca, pero el recuerdo de los meses en el hospital me hizo tener los pies en el suelo y lo llevé bien. Lo relativizas todo, el éxito es vivir.

A veces te oigo hablar por la radio en alguna tertulia y me admiro por la cantidad de cosas que sabes. ¿Cómo lo haces?

La gente que hablamos mucho rato en la radio -yo hago cada día 3 horas de radio- somos un poco tramposos. Lo que he dicho esta mañana tal vez hace una semana no lo sabía. Mi responsabilidad es informarme al máximo para no defraudar a mis oyentes...

¿Pero cómo lo haces?

Cuando llego aquí ya he leído 3 diarios. Si entrevisto a algún escritor leo alguna obra. Los fines de semana sigo leyendo. La cultura profunda para mí es otra cosa, es tiempo de leer, de digerir y adquirir una actitud crítica sobre lo que lees, lo que ves...

Este tipo de conocimientos que tienes tú sobre política, historia y actualidad en general, ¿son conocimientos que suelen tener los hombres más que las mujeres?

Cualquier editor te dirá que los hombres leen más ensayos y las mujeres más novelas, pero los ensayos hablan de verdades caducas y en cambio las grandes novelas hablan de verdades universales y eternas. Por tanto, las mujeres somos sabias pero siempre dudamos de nuestro valor, los hombres nunca. Pero el tema no es adaptarnos a este mundo, sino feminizarlo.

¿Piensas que si las televisiones públicas quisieran podrían hacer programas de más calidad ya que no dependen tanto de la publicidad?

Sí podrían, y deberían hacer todo lo que las privadas no hacen, pero dicho esto también pienso que las privadas tienen también la responsabilidad de educar a la gente porque el gobierno, en nombre de todos, les ha concedido una licencia y, por tanto, una responsabilidad.

¿Conoces la televisión de algún otro país, que sea mejor que la nuestra?

La italiana es peor que la nuestra, la americana también, la francesa y la británica son mejores. Por ejemplo, hacen programas que aquí serían minoritarios y en cambio allí los ven un número suficiente de gente para que se puedan mantener. Pero quizás esto no es un mérito de las televisiones, sino del nivel cultural de la gente que es más elevado que el de aquí.

Tienes una niña y vives con su padre, ¿no? ¿No tenéis problemas de pareja por tu trabajo?

No, porque tengo un hombre lo bastante inteligente, cosa que no ocurre en todas las parejas que yo conozco. Los hombres que tienen un trabajo importante tienen una mujer en casa que se ocupa de la intendencia, de los hijos. Las mujeres no, y por eso estamos extenuadas.

¿Ha cambiado la forma de relacionarte con los hombres con los años?

Cuando eres joven estás muy pendiente de agradar, y con los años sigues queriendo gustar, pero empiezas a querer que te valoren.

¿Y con las mujeres?

Siempre he sido cómplice con las mujeres.

¿Eres feliz?

Soy moderadamente feliz.

 

Cuestionario

¿Cuál es tu idea de la felicidad?
Amar y que me quieran los míos.

¿Cuál es tu mejor cualidad?
La fortaleza.

¿Qué has aprendido con los años que te hace vivir mejor?
Que todo es relativo.

¿Piensas que los hombres están mejorando?
No, pero nosotras tenemos una parte de culpabilidad, están esperando...

¿En qué nos diferenciamos los hombres de las mujeres?
Nosotras sufrimos más y ellos son más pragmáticos.

 

Personal

¿Cuál es tu programa de televisión preferido de todos los que han hecho?
Tribunal popular que lo hacía Manuel Delgado

¿De los actuales?
El que hace Iñaki Gabilondo.

¿De los que has hecho tú?
Las Cerezas

¿A qué periodista admiras?
A Pilar Rahola.

¿Y periodista hombre?
Iñaki Gabilondo.


Versión original en catalán:

dDONA, Núm. 16, tardor 2009

La Júlia va néixer a Monforte de Lemos, província de Lugo, el maig del 1959. Es va traslladar amb la seva família a Barcelona quan tenia 3 anys. Es va llicenciar en Filologia Hispànica i mentre estudiava el primer curs de carrera un amic li va proposar que l’acompanyés a un programa radiofònic sobre cine, Protagonista, el cine, a Ràdio Sabadell. La Júlia, que aleshores tenia 17 anys, no solament va acceptar l’oferta, sinó que va acabar convertint-se en la directora i presentadora del programa quan el seu amic se’n va anar a la mili.

A partir d’aquí no va parar de treballar a la ràdio i a la televisió, fins a treballar per TVE en el programa La Luna, on es va fer famosa. Actualment té una productora pròpia, i segueix treballant a la ràdio i la televisió.

Hola Júlia, quan vas començar a treballar a la ràdio, què és el que t’agradava de la teva feina?

Des de petita m’ha agradat parlar i comunicar-me. Des de molt petita els adults deien de mi que semblava una vella parlant, i més endavant recordo una professora dient-me d’un examen: «el fons no acaba de ser correcte, però ho expliques tan bé que no tinc més remei que aprovar-te».

M’agrada explicar històries i escoltar-les, conversar... i la ràdio i la televisió és una conversa amb gent a vegades que no veus però que saps que hi són.

Encara t’agrada el mateix?

El món ha canviat molt des d’aleshores, ara els diaris i les emissores són de grans empreses que tenen diversos negocis i aquest n’és un més, i només volen guanyar diners, vendre més, i el compromís del periodista ha anat perdent pes.

Amb la crisi no hi haurà un canvi?

Podria ser la part positiva, sí, revalorar conceptes desprestigiats com la felicitat com a objectiu vital. Fins ara era tenir diners i estar ben col•locat. Potser a partir d’ara començarem a valorar fer una feina que ens agradi... però sóc bastant pessimista, que no vol dir trista. Si t’hi fixes no es fa cap tipus de reflexió social sobre aquests temes, ni de la gent que l’han provocada. Estan provant de totes maneres que tot torni a la normalitat, o sigui, a la situació d’abans.

Tu treballes en el que t’agrada?

Hi ha dies de tot, com en totes les feines, però és una feina que l’he triat jo i em dóna diners per viure molt bé. No tothom pot dir el mateix.

Què creus que et va fer triomfar i encara atrau a la gent de tu quan treballes a la ràdio o a la tele?

M’he guanyat la credibilitat i, a més, tinc naturalitat i espontaneïtat. Sóc igual a la vida que davant d’una càmera.

I la confiança amb tu mateixa?

A vegades quan penso en les coses que feia fa 20 anys m’espanto. Era innocent i agosarada...

Però la teva confiança amb tu mateixa d’on la treies?

Jo sóc filla única i els meus pares em van donar molta confiança, ningú creia més en mi que ells. Crec que és molt important que les persones que més t’estimen et transmetin la idea que pots fer el que vulguis. Si ells confien en tu, perquè no has de confiar en tu mateix? A més, la vida m’ha donat ensurts de salut, dels 19 als vint i escaig vaig entrar a la sala d’operacions moltes vegades, i vaig veure la mort a prop. La vida em va canviar, vaig madurar. Després, als 28 anys vaig passar de ser una desconeguda a ser famosa de la nit al dia. I em podria haver tornat boja, però el record dels mesos a l’hospital em va fer tenir els peus a terra i vaig portar-ho bé. Ho relativitzes tot, l’èxit és viure.

A vegades et sento parlar per la ràdio en alguna tertúlia i m’admiro per la quantitat de coses que saps. Com ho fas?

La gent que parlem molta estona a la ràdio —jo faig cada dia 3 hores de ràdio— som una mica tramposos. El que he dit aquest matí potser fa una setmana no ho sabia. La meva responsabilitat és informar-me al màxim per no defraudar els meus oients...

Però com ho fas?

Quan arribo aquí ja he llegit 3 diaris. Si entrevisto algun escriptor en llegeixo alguna obra. Els caps de setmana continuo llegint. La cultura profunda per mi és una altra cosa, és temps de llegir, de pair i adquirir una actitud crítica sobre el que llegeixes, el que veus...

Aquest tipus de coneixements que tens tu sobre política, història i actualitat en general, són coneixements que acostumen a tenir els homes més que les dones?

Qualsevol editor et dirà que els homes llegeixen més assaigs i les dones més novel•les, però els assaigs parlen de veritats caduques i en canvi les grans novel•les parlen de veritats universals i eternes. Per tant, les dones som sàvies però sempre dubtem del nostre valor, els homes mai. Però el tema no és adaptar-nos a aquest món, sinó feminitzar-lo.

Penses que si les televisions públiques volguessin podrien fer programes de més qualitat ja que no depenen tant de la publicitat?

Sí que podrien, i haurien de fer tot allò que les privades no fan, però dit això també penso que les privades tenen també la responsabilitat d’educar la gent perquè el govern, en nom de tots, els ha concedit una llicència i, per tant, una responsabilitat.

Coneixes la televisió d’algun altre país, que sigui millor que la nostra?

La italiana és pitjor que la nostra, l’americana també, la francesa i la britànica són millors. Per exemple, fan programes que aquí serien minoritaris i en canvi allà els veuen un nombre suficient de gent perquè es puguin mantenir. Però potser això no és un mèrit de les televisions, sinó del nivell cultural de la gent que és més elevat que el d’aquí.

Tens una nena i vius amb el seu pare, no? No teniu problemes de parella per la teva feina?

No, perquè tinc un home prou intel•ligent, cosa que no passa en totes les parelles que jo conec. Els homes que tenen una feina important tenen una dona a casa que s’ocupa de la intendència, dels fills Les dones no, i per això estem extenuades.

Ha canviat la manera de relacionar-te amb els homes amb els anys?

Quan ets jove estàs molt pendent d’agradar, i amb els anys segueixes volent agradar, però comences a voler que et valorin.

I amb les dones?

Sempre he estat còmplice amb les dones.

Ets feliç?

Sóc moderadament feliç.

 

Qüestionari

Quina és la teva idea de la felicitat?
Estimar i que m’estimin els meus.

Quina és la teva millor qualitat?
La fortalesa.

Què has après amb els anys que et fa viure millor?
Que tot és relatiu.

Penses que els homes estan millorant?
No, però tenim una part de culpabilitat nosaltres, estan esperant...

En què ens diferenciem els homes de les dones?
Nosaltres patim més i ells són més pragmàtics.

 

Personal

Quin és el teu programa de televisió preferit de tots els que s’han fet?
Tribunal popular que el feia el Manuel Delgado

Del actuals?
El que fa l’Iñaki Gabilondo.

Dels que has fet tu?
Las Cerezas

A quina periodista admires?
A la Pilar Rahola.

I periodista home?
Iñaki Gabilondo.


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