Editorial del 10 de enero de 2011

Hace 4 horas, ETA ha dado una noticia que, en palabras de Rubalcaba, no es una mala noticia pero desde luego no es LA NOTICIA. La capacidad para titular del ministro del Interior es indiscutible.

ETA ha comunicado a las 12 del mediodía que asume un “alto el fuego permanente, general y verificable internacionalmente”. Dos horas más tarde, el ministro del interior les ha contestado que “permanente” no es irreversible, que alto el fuego no es “disolución” y que verificar, aquí quien verifica es la policía y no unos señores extranjeros por importantes que sean.

¿Estoy más tranquilo hoy que ayer? Se ha preguntado Rubalcaba. Y ha respondido, sí. ¿esto es el fin de ETA? NO, ¿es lo que estaba esperando el gobierno y la sociedad española?, Rotundamente No. La claridad del hombre fuerte de Zapatero, lleva a una conclusión: no hay trato, porque hay truco. La contrarreloj del mundo batasuno para poder presentarse a las próximas elecciones municipales de mayo parece hoy más que ayer una carrera sin meta.